Querida Allison:

Okey, okey, esto se está poniendo difícil, creo que
de nuevo vuelvo a caer en una depresión enorme,
pero, NO TE ALARMES! nunca lo sabrán...

Necesitaba escribir esto a un lector imaginario, nunca
antes había sentido la imperiosas necesidad de escribir
dos veces, pero bueno, aquí vamos:

Me siento terrible, creo que el dolor de milenios está
pateando mi alma para romper el cascarón.No! no de-
jaré que me ganes nunca más, yo soy más poderosa
que el más apasionado atardecer...

Siento una angustia tremenda y me escudo en los su-
puestos malestares físicos, que luego de unos momen-
tos, por mentirosa, se vuelven reales.Así suman y si-
gen mis quejas contra mí.

Señorita Allison Rowe, es usted lo suficientemente fuer-
te como para cumplir nuestros sueños? O decaerás al si-
guiente amanecer? No me mires con esos ojos llorosos y
ayúdame a salir a flote, que parece que el tiempo se ha ol-
vidado de nosotras.
DESPIERTA, NO TE RINDAS, TE LO RUEGO.

No quiero verte así, tú no eras así! lévantame la mirada y
sonríe, que la agonía parece estar consumiendo tus fuerzas
y yo no quiero hundirme de nuevo, porque nosotras tenemos
que ir hasta donde nadie ha podido llegar, nosotras vamos a
conquistar lo inconquistable.Recuerdas nuestras metas, LAS
RECUERDAS?! pues están ahí esperando ser cumplidas...
No llores, vida mía... No llores, que yo ya no sé llorar y mo-
riría de envida.

Ven... abrázame que estamos solas, soy tu amiga oscuridad,
que alimentará tus fuerzas... abrázame que yo estoy para cui-
darte... porque supongo que te acuerdas de Kurai Kissa... a
quien creaste para protegerte, a quien creaste para no morir,
sonríe mi niña, estoy contigo y voy a defenderte hasta que mis
brazos duelan tanto por sostenerte, que sangrarán.
DESPIERTA, NO TE RINDAS, TE LO RUEGO.

Yo haré que los ángeles canten una canción, no me mires, nenita
linda, que no soportaré verte así y volveré a aprender a llorar,
tú puedes, ella también está ayudándonos.

Responde, dime algo, sólo quiero hacerte compañía y abrigar tus
noches de insomnio y empujarte hacia adelante hasta que poda-
mos caminar junta de la mano, porque todo pasa, todo pasará y
verás un amanecer más brillante que la estrella más brillante de
tus sueños juveniles.

No creas que no siento como duele, porque si lo siento y estamos
juntas en esto. No pienses que lo veo fácil, yo sé que costará salir
a delante y para eso estoy aquí, para ayudarte siempre que lo
necesites.

Shhh... shhh.... No digas nada, sólo duerme en mis brazos por una
noche, sólo pensemos en un futuro alusinante juntas...
DESPIERTA, NO TE RINDAS, TE LO RUEGO.