Contagioso!

Te dejaré ser un dulce veneno que recorre mi sangre. Oh sí!
ven e inyéctate en mis venas, a caso no lo sientes fluir? creo
que la locura se huele a kilometros!. No hagas como que no
sabes nada y enséñame de tu ENFERMEDAD! si hasta tu
forma de escribir parece apoderarse de mi cuerpo ya demente.

Pues claro! que de querer escribir poemas ahora sólo quiero
DISTORCIONARME, pero eres una droga demaciado fuerte
como para lograrlo sin MATARME.

Sí, sí, sí, sí! Ya puedo sentir que todo está mal y me gusta!
No, no, no no! No te detengas aunque me veas AGONIZAR!
Porque ya sabes jugar, simplemente educa mi INSTINTO
ANIMAL y verás como todo funciona cada vez peor!

Pero si parece que el sol danza celebrando mi pérdida de
cordura, o es a caso que ya estás haciendo efecto, DULCE
DROGA?! porque desde acá todo parece moverse al son
de la EUFORIA y tú estás, ahora, siendo MI VÍCTIMA, ya
que siendo aprendiz SUPERÉ al maestro y el maestro yace
aturdido en MI CAMA, haciendo otro viaje a mi cuerpo, empe-
zando por cada ARTERIA! y cotangiando mi corazón, hasta que
toda gota de sangre se transforme en ÉXTASIS!.